Qué pasa con los pies?

Últimamente muchos momentos me remiten a los pies. No sólo al momento de comprarme zapatos (que me cuesta porque calzo 41, sí como oyen 41) donde no puedo elegir modelos que me encantan porque NO HAY. Tengo un mambo con mis pies por lo grandes y porque no puedo entregarlos me cuesta. (Esta es la parte de la historia en que dirán qué le pasa a esta?) Me cuesta, puedo entregar el corazón, la billetera o cualquier cosa pero no puedo entregar los pies. Entregar los pies es abrir el alma para mí. Dejar que me toquen los pies, que me masajeen o inclusive que me los chupen es abrirme por completo. Es demasiado pedir. Sin embargo, a medida que comento el tema hay mucha gente que piensa como yo (digo, no en mis pies sino con los suyos jajaja). Los pies son un fetiche sexual porque tienen muchas curvaturas que remiten inconcientemente a lo fálico y a la dominación.

Comentarios

Lalita dijo…
pone la foto de nuestros pies!
odio los pies
Anónimo dijo…
Pau no estoy de acuerdo con tu comentario. Creo que te perdés un placer muy grande por no "entregar" los pies. Podrán ser un fetiche sexual, pero me gusta más pensar que son sensuales. Un hombre que se siente atraído por los píes de una mujer, habla de una sensibilidad distinta y de otra intimidad.
Consejo: Entregá los pies!!
Osvaldo
Muy bueno tu blog
Anónimo dijo…
De verdad que nunca entregaste tus pies???....Mmmmm...la verdad no se si creerte

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